Este martes por la mañana, el Comando Aéreo de Transporte Militar (Catam) recibió la llegada del Boeing 737-700 de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC), que trajo consigo un primer grupo de 95 colombianos deportados desde Estados Unidos. Esta operación se lleva a cabo en el contexto de la solución a la reciente crisis diplomática entre los gobiernos de Colombia y EE. UU., tras una negativa del presidente Gustavo Petro a aceptar dos aviones militares que transportaban a connacionales deportados.
El vuelo FAC1222 despegó desde Biggs Army Airfield en El Paso, Texas, a la una de la madrugada y aterrizó en Bogotá a las 7:00 a.m. del mismo día. Al descender, los deportados fueron conducidos en autobús hacia el aeropuerto internacional El Dorado, donde realizaron los trámites pertinentes en Migración Colombia. Sin embargo, la llegada de los colombianos fue marcada por la decisión de la Cancillería de restringir el acceso a la prensa, citando el respeto a la privacidad y el buen nombre de los deportados.
Entre los deportados se encontraban 26 niños y niñas, según informó Astrid Cáceres, directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). Las autoridades han señalado que los deportados suelen representar tres perfiles; una proporción menor está compuesta por aquellos inadmitidos, quienes no logran pasar los controles en los aeropuertos norteamericanos. Con este retorno, Colombia inicia un proceso de reintegración para sus ciudadanos que enfrentan el desafío de readaptarse a su país de origen.
Ver video aquí: https://www.facebook.com/share/v/18hDwQcHuq/